DESGARROS EN EL PARTO.

¿Cómo son los desgarros en el parto?

Un miedo frecuente de cara al parto es la posibilidad de sufrir algún tipo de desgarro perineal.
Pero no todos los desgarros en el parto son iguales y, por tanto, su recuperación tampoco es igual. También hay mujeres que no tienen ningún tipo de desgarro , es decir, tienen un periné intacto, esto es más frecuente en mujeres que ya han parido previamente.

¿Qué tipos de desgarros hay en el parto?¿Son graves?

Hay 4 tipos de desgarros:
–Tipo 1: Afectan a la mucosa vaginal.
–Tipo2: Además de la mucosa vaginal, afecta al plano muscular del suelo pélvico.
–Tipo 3: Afectan al esfínter anal. Dentro del tipo 3 hay 3 subgrupos.
           3A. Afecta a menos del 50% del esfínter externo
           3B. Afecta a más del 50% del esfínter externo
           3C. Afecta a esfínter externo e interno.
–Tipo 4: Afecta todo lo anterior y llega a mucosa rectal.
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Los desgarros más frecuentes son los leves que son los tipo 1 y 2. Los desgarros graves son poco frecuentes aunque requieren seguimiento posterior ya que su recuperación es más difícil y puede dejar secuelas.

Hay otro tipo de heridas en el periné que son lo que llamamos laceraciones y generalmente se producen en los labios; son rasguños que muchas veces ni sangran por lo que no es necesario suturar.

CUIDADO DE LOS DESGARROS DEL PARTO Y LOS PUNTOS.

Durante el posparto los cuidados a realizar son:
-Ducha diaria con agua y jabón neutro.
-Cambio frecuente de compresa.
-Secar a toques y no por arrastre.
-Descansar de lado si te molestan pero nunca usar un flotador.
-Analgésicos/antiinflamatorios si es necesario.

Una vez cerrada la herida, te recomiendo masajear la cicatriz tanto por fuera como por dentro ya que ayuda a la recuperación.
Si sientes molestias durante a cicatrización, tras ella o al reinicio de las relaciones sexuales, consulta siempre con tu matrona para valorar recuperación y si está indicado derivar, reevaluar, tratar….

No debemos normalizar el dolor, si duele hay que valorar.

EL OBJETIVO DEL PARTO NO ES EVITAR UN DESGARRO.

Casi en un 80% de los partos vaginales habrá algún tipo de herida, así que no es ningún fracaso si no tienes un periné intacto tras parir.
La recuperación de los desgarros leves (los más frecuentes como os decía) suele ser muy buena.

LAS EPISIOTOMÍAS NO PREVIENEN LOS DESGARROS

Hace años se pensaba que las episiotomías (corte que se realiza en el periné para aumentar el canal del parto y facilitar la salida del bebé) disminuía la tasa de desgarros graves. La evidencia científica actual ha demostrado que no es así, por lo que se recomienda una política restrictiva de episiotomías ya que no mejora los resultados y sí aumenta el dolor y complicaciones, comparado con los desgarros leves.

Si quieres tener más información real y actualizada sobre la asistencia al parto, nos vemos en el Curso de preparación al parto